No hace mucho, platicando con una persona dedicada a informar a través de su importante medio de comunicación, me preguntó que cuál era el objetivo del Movimiento Antorchista en Querétaro. Mi respuesta inmedianta fue que el antorchismo nacional, igual que en Querétaro, trabaja y lucha en la construcción de una patria mejor para todos los mexicanos, donde la riqueza producida por todos, se reparta de manera más justa y equitativa en beneficio de todos, pues actualmente se reparte el trabajo, pero la riqueza se concentra en unas cuantas manos.
Como sabemos, a los problemas de violencia e inseguridad, de falta de atención a la salud que se complica cada vez más por la falta de inversión, de educación y falta de infraestructura que enfrentamos los mexicanos, se suma finalmente, los enormes niveles de pobreza que afecta a la gran mayoría de la población, consecuencia sin duda, de la combinación de ineptitud y bandidaje de todos quienes nos han gobernado a lo largo de varias décadas.
Y es consecuencia inequivoca del hecho de que las fuerzas políticas organizadas en los partidos reconocidos legalmente, no representan los verdaderos intereses del pueblo; por el contrario, abanderan los intereses de las clases altas, como los poderosos grupos empresariales. Las élites, incrustadas en los partidos políticos solo buscan a la gente cuando hay elecciones, olvidándose de ella en los periodos de inactividad electoral.
Ni más ni menos que como sucede en el estado de Querétaro, gobernado por el panismo, representado ahora por Mauricio Kuri, a quien a pesar de que el Movimiento Antorchista le ha hecho entrega oportuna, cada año de su administración, un pliego petitorio de obras de varios municipios, como agua potable, electrificaciones, drenajes, pavimento de caminos y regularización de asentamientos, para que fueran considerados en los programas de obra, después de infinidad de gestiones y mesas de trabajo con funcionarios de la Secretaría de Gobierno, a casi cuatro años, no ha habido respuestas concretas y resolutivas.
Los funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Social del Estado (SEDESOQ), de la Comisión Estatal de Aguas (CEA), del Instituto de Vivienda (IVEQ), Secretaría de Obras Públicas (Sduop), Secretaría de Desarrollo Agropecuario, de la Secretaría de Educación y demás dependencias del Estado, no resuelven absolutamente nada porque esas son las intrucciones.
Igual que como acontece exactamente en los municipios gobernados por políticos del mismo partido y de sus partidos satélites o aliados, llegando al extremo de condicionar la atención a los ciudadanos de los pueblos y colonias, así sean las necesidades y trámites más urgentes, a quienes formen parte del Movimiento Antorchista, como sucede, entre otros municipios, en Colón, gobernado por Movimiento Ciudadano.
Pero como reza el dicho popular, “no hay mal que por bien no venga”, pues, el degradante e indigno trato de que ha sido víctima la población queretana, la ha llevado a entender acertadamente, que son siempre las mismas familias y los mismos políticos quienes se rolan el poder para enriquecerse. Los ha ido llevando cada vez más a la conclusión, de que si bien no deben desistir en su lucha, porque es su derecho, por mejorar sus condiciones materiales inmediatas, como vivienda, agua potable, escuelas o mejoramiento de caminos, la batalla fundamental debe ser por cambiar el actual estado de cosas, y destituir del poder a quienes los han menospreciado y marginado durante toda su vida.
No creo exagerar al decir que se aprecian ya, marcadas regiones del estado donde, a pesar del cerco para controlar y manipular a la ciudadanía con bonitos discursos y raquíticas tarjetitas, se empieza a hacer evidente una creciente indignación y hartazgo hacia quienes han gobernado el estado, de forma altanera y arrogante. Ya no se chupan el dedo, con el cuento de que para los pueblos polvorientos y olvidados nunca hay dinero, mientras ellos gastan dinero a manos llenas en campañas para tener más poder.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario