Los alcaldes de Tixcacalcupul, Mateo Cahum, y de Chankom, Roger Cimé, priístas ambos, se niegan en redondo a atender las peticiones de la gente humilde de su municipio organizada en el Movimiento Antorchista; los dos han adoptado la misma actitud de desprecio ante las demandas de sus gobernados. Cuantas veces acude la gente a sus oficinas a presentar sus peticiones o a demandar cumplimiento a los compromisos hechos anteriormente, las humillantes e increíbles respuestas que reciben son: "no hay recursos"; "ya están asignados los apoyos"; "estoy cumpliendo con todos"; "no tengo compromisos con ustedes", etcétera. Ante la negativa reiterada de los susodichos presidentes municipales a comportarse de manera humilde, escuchar y resolver las peticiones de sus gobernados, damos a conocer el problema a la opinión pública y demandamos respetuosamente al Gobierno de Estado, así como a las autoridades del partido del que emanó la candidatura de los hoy soberbios alcaldes, que intervengan para frenar las violaciones a la ley que estos señores cometen, al discriminar a un grupo importante de sus gobernados y distribuir de manera sesgada el recurso público.
Las peticiones que se les han hecho no son otras que de obras y apoyos asitenciales para sus gobernados: acciones de mejoramiento y ampliación de vivienda para decenas de familias que viven hacinadas, o sin un baño donde hacer sus necesidades básicas; caminos sacacosechas en Ekpedz y Mahas; apoyo a campesinos con subsidio del 25 por ciento del costo de fertilizantes; apoyos para traslados médicos y medicamentos a familias pobres extremas; baños públicos para cientos de personas que periódicamente acuden a reuniones convocadas por el gobierno en Xthobil; uniformes y equipamiento deportivo para jóvenes futbolistas, porterías tubulares y mejoramiento de canchas de fútbol; pavimentación de 4 km del camino Chankom-Xbojom, entre otras. Como se ve, varias peticiones ni siquiera requieren de una gran inversión de recursos, sino sólo de la voluntad de los insensibles alcaldes.
En el colmo del cinismo, el señor Mateo Cahum, a pesar de que los antorchistas lo apoyamos decididamente tanto en la elección interna de su partido como en la constitucional para que se "sentara en la silla", de que firmó acuerdos con la organización en presencia de habitantes de todas las comunidades grandes del municipio y de que en reuniones sostenidas a finales del año pasado e inicios de este con representantes del Gobernador del Estado se comprometió a que en marzo daría cumplimiento a los acuerdos, hoy el señor simplemente ignora por enésima vez lo dicho, burlándose así ya no sólo de los humildes tixcacalcupuleños, sino de la máxima autoridad de Yucatán.
El Presidente Municipal de Chankom, por su parte, ha llegado al absurdo de negarse a recibir las solicitudes de los antorchistas pues no quiere hacer "compromiso"-dice- al tiempo que enfatiza: "yo, no tengo ningún compromiso con ustedes", "mándenme a la gente una por una, que así yo la atenderé", entre otras aberraciones por el estilo, que hablan de un primitivismo político asombroso y son violatorias de los derechos más elementales de sus paisanos a los que antes prometió servir.
Por lo anterior, reiteramos nuestro llamado a las más altas autoridades del estado a que intervengan para frenar los abusos de estos regidores metidos a reyezuelos, pues afectan a cientos de habitantes humildes de sus municipios, negando solución con recursos públicos – por definición, recursos de todos- a problemas elementales de la gente, frenando así el desarrollo de sus comunidades. Nuestra organización, ante una justa demanda como la que hoy planteamos, nunca ha dejado de luchar, por lo que perseveraremos hasta encontrar oídos receptivos.
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