Todas las manifestaciones que se presentan ante nuestros sentidos son fenómenos procedentes o provocados por una esencia que no es perceptible a simple vista y que exige un análisis a fondo para conocer la verdad intrínseca. La seriedad debe ser absoluta, pues, si no se le estudia correctamente se puede llegar a conclusiones y soluciones falsas.
El día y la noche son posibles gracias a que la tierra posee un movimiento que dura 24 horas en girar sobre su propio eje, ydependerá de la posición en que se encuentre la tierra respecto del sol. Siglos antes de esta verdad, el mundo creyó que el día y la noche eran posibles gracias a que el sol y todos los astros giraban alrededor de la tierra, pues consideraban que nuestro planeta era el centro del universo. Con el avance de la ciencia y la tecnología, muchas dudas se disiparon. Preguntas sobre fenómenos que en otro tiempo no tenían respuesta, ahora se conoce con certeza la causa que los provoca. La lluvia, el aire, la luz, los terremotos, las enfermedades, la mercancía, la pobreza y la riqueza, etc., hoy se conoce su causa. Peroestá demostrado que muchas veces los intereses impiden que se sepa la verdad de algún fenómeno. Galileo Galilei demostró en su tiempo que la tierra no era el centro del universo, sino que esta giraba alrededor del sol, pero la inquisición lo obligó a abdicar de su descubrimiento porque minaba los cimientos de la teoría geocéntrica sostenida por el clero en el seno de la sociedad feudal. Giordano Bruno murió en la hoguera por atrevido. Pero el tiempo les dio la razón.
Igualmente, Carlos Marx demostró que la sociedad moderna está dividida en clases; la dominante y la dominada, los que mandan y los que obedecen, removió los cimientos de la sociedad capitalista y nos heredó una nueva forma de concebir el mundo a través del método dialéctico de Hegel y planteó de manera científica, en su gran obra,"El Capital", la teoría del valor, pero por razones poderosas h sus aportaciones a la humanidad están eclipsadas porque no convenía niconviene que salgan a la luz. A pesar de ello, todos los fenómenos de la naturaleza, la sociedad y del pensamiento están sometidos a ladialéctica de Marx.
Justamente en nuestros días, las elites sociales más poderosas del país han encontrado en el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador y su partido, Morena, el camuflaje perfecto, ya quedurante los 18 años que duró su campaña, criticó el sistema económico neoliberal implantado en México desde hace más de 30 años, y a poderosos miembros de la "mafia del poder", a quienes también llamó en reiteradas ocasiones, "traidores a la patria", con quienes hoy conviven en armonía, ensayando la "reconciliación" y la "patria amorosa", convertiéndose en sus consejeros de cabecera. Paraesta alianza, todo el que se muestre contrario a sus políticas instrumentadas, es inmediatamente considerado tropa enemiga y se les combate con furia, sobretodo si se trata de organizaciones que defienden los derechos del pueblo y proponen un reparto equitativo de la riqueza nacional como el Movimiento Antorchista Nacional.
Así procede hoy el presidente de la Republica en contra del antorchismo nacional. No hay tribuna en el que no lance calumnias, injurias y amenazas contra Antorcha, tachándola intermediario y exigir dinero del presupuesto para el enriquecimiento de sus líderes, que no ha podido demostrar. Pero, ¿por qué no presenta las pruebas y enjuicia legalmente a quien haya cometido algún ilícito? Mientras no lo haga y continúe difamando al antorchismo y a su máximo lider, Ing. Aquiles Córdova Morán, no dejaremos de decir que AMLO miente y sirve a intereses poderosos y oscuros. Si de algún "delito" se puede acusar al Movimiento Antorchista Nacional será en todo caso,de educar y politizar al pueblo y promover el cambio de modeloeconómico neoliberal, causante de todos los males sociales que ha empobrecido a miles de millones de mexicanos, concentrando la riqueza en unas cuantas manos y propone en su lugar, empleo para todos, elevación de los salarios, cambio en la política fiscal, donde paguen más los que tengan mayor ingreso, y reorientar el gasto público en obras para los más necesitados. ¡No más en tiempos de la cuarta transformación!
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