Teatro Aquiles Córdova Morán abre el telón con puesta en escena de Chiapas
Tecomatlán, Pue. Chiapas abrió la participación del XXIV Encuentro Nacional de Teatro en la categoría Semiprofesional. Fue la tarde de ayer cuando se presentó “De un paso a un entremés” del autor Lope de Rueda y Miguel de Cervantes y dirigido por William Ochoa, en el imponente Teatro “Aquiles Córdova Morán” de Tecomatlán, Puebla.
Los entremeses cervantinos y los pasos de Lope de Rueda siempre han sido admirados sin vacilaciones, pues destacan por la calidad basada en el doble juego de fantasías y realidades; manejan los grandes supuestos de la sociedad contemporánea, burlándose suavemente, con un último regusto de amargura y desencanto.
Lope de Rueda fue un pionero en la creación de un teatro nacional con personajes y lenguaje propios del pueblo; mientras Cervantes continuó y perfeccionó esta tradición, especialmente en el género breve del entremés.
Durante 62 minutos se desarrolló la obra “De un paso a un entremés”, en donde unos 25 actores chiapanecos hicieron la unión de dos formas de hacer el teatro, pero una misma identidad: la escena.
Se trata de dos historias que, por un lado, buscan hacer reír o divertir a los asistentes; a su vez, “La tierra de Jauja”, una utopía en donde se come sin trabajar, mientras que la segunda, “La guarda cuidadosa”, es la historia de un amor no correspondido.
En la escena se observó la interpretación de “La tierra de Jauja”: Honzigera y Panarizo, en donde dos ladrones hambrientos deciden asaltar a Mendrugo, un labrador que lleva comida a su esposa en la cárcel. Con astucia, lo engañan hablándole sobre la fantástica tierra de Jauja, un lugar utópico donde la comida abunda y está prohibido trabajar.
Aprovechando la distracción de Mendrugo, Honzigera se zambulle en la cazuela de buñuelos, devorando rápidamente todo el manjar. Mendrugo, desconcertado, comprende que esa tierra es sólo una ilusión y que la felicidad no proviene de promesas ficticias.
“La guarda cuidadosa” es un entremés de Miguel de Cervantes en el que una joven y bella fregona, Cristina, es cortejada por dos hombres pobres: un soldado arrogante y un sacristán. El soldado vigila a Cristina como su “guarda cuidadosa”, intentando ahuyentar a otros pretendientes.
El drama de la historia se presenta cuando se da una pelea con el sacristán y el soldado, y termina cuando Cristina elige casarse con el sacristán, quien tiene un sueldo que le permite vivir mejor.
Al terminar la participación, Cutzi Aguilar de la Cruz, responsable cultural en Chiapas, expresó que los actores, amigos de la organización, se fueron satisfechos por el compromiso que Antorcha tiene con la cultura y cómo la ha ido desarrollando con el objetivo de llevársela a la gente más humilde para que alimente sus conocimientos. Y espera que el jurado dé los resultados con base en los aspectos a calificar, que fueron: propuesta de dirección, actuación, memorización del texto, dominio de la escena, producción, discurso de la obra y escenografía.
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