Durante un evento público celebrado en la comunidad de San Matías Cocoyotla en agosto de 2017, el entonces director de Desarrollo Social, Luis Alberto Arriaga Lila dijo sentirse gustoso de "que el gobierno de San Pedro Cholula tenga la oportunidad de recibir el apoyo de Antorcha Campesina". Agregó que "la política se hace, no se dice y, cuando no hay una calle pavimentada, una banqueta o cualquier otra obra de infraestructura, ésta queda en simple palabrería". El evento realizado fue para celebrar la inauguración de varias obras como fruto del trabajo de los diputados antorchistas, a quienes los vecinos recurrieron para que encabezaran la gestión y así poder acceder a estos servicios.
Durante esa administración, encabezada por el ahora diputado local José Juan Espinosa Torres, el Movimiento Antorchista gestionó y materializó más de 30 millones de pesos en obras para las familias de escasos recursos de juntas auxiliares como San Matías Cocoyotla, San Juan Tlautlla, San Sebastián Tepalcatepec, Santa María Acuexcomac, San Diego Cuachayotla, Santa Bárbara Almoloya, San Agustín Calvario. Las familias buscaron, ante la nula acción de su gobierno municipal, el respaldo de su organización para atender demandas que durante años esperaban ser atendidas y que el ayuntamiento no pudo resolver pese a la necesidad y constante demanda de los vecinos.
Pues bien, ahora que el señor Arriaga es el edil de este municipio, valdría la pena suponer que, como consecuencia de pertenecer a la administración pasada, conoce, si no perfectamente, sí en buena medida los principales problemas que aquejan a la población y con acciones respaldar su argumento de que "la política se hace, no se dice", pero la realidad dista mucho de ser así.
Desde el inicio de su administración los vecinos de diferentes comunidades se presentaron en las instalaciones del palacio municipal para entregar el pliego petitorio que contiene las necesidades que ellos mismos consideran más urgente atender, sin embargo, hasta la fecha la única respuesta del gobierno municipal, por la vía del hecho, es la negativa rotunda. El presidente municipal se ha olvidado de sus palabras al negarse en reiteradas ocasiones a atender las necesidades de los antorchistas, a quienes en el pasado calificó de importantes aliados, les sonreía, abrazaba y saludaba muy afectuosamente. Eso quedó en el olvido. Ahora sólo hay indiferencia y desprecio para el pueblo pobre cholulteca.
La actitud de Arriaga Lila es una raya más al tigre de Morena, partido que en poco ha dejado ver su ineptitud para resolver los problemas de la ciudadanía en los diferentes niveles de gobierno. Lejos de ver al pueblo organizado como una molestia, debería ver en él un importante aliado que puede servirle como brújula en el campo de tomar decisiones respecto a los problemas que deben atenderse con urgencia, pues es el propio pueblo quien padece los males.
Pero no es así, mientras los vecinos de las juntas auxiliares se encuentran encadenados al grillete de la pobreza el mandatario municipal es uno de los mejores pagados en la zona metropolitana del estado, según revela el ranking salarial de presidentes municipales, regidores y síndicos de los 15 municipios más poblados titulado "El municipio: primero mi salario y después la ciudadanía", realizado por el Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal.
No sólo eso, el último reporte del Secretariado Nacional de Seguridad Pública (SNSP) con cierre a junio de este 2019, es decir del primer semestre del año, en comparación con el primer semestre de 2018 muestra que en promedio los delitos han incrementado un 50%. Los delitos que presentan más aumento son: lesiones dolosas, robo de autopartes, robo de vehículo, asalto a transporte público y homicidios dolosos.
De acuerdo con la página web de un medio informativo, en lo que va de la administración, Luis Alberto Arriaga "ha abandonado sus funciones para visitar Cuba, Acapulco y Cancún; pero además ha pasado fines de semana completos en San Miguel de Allende y Atlixco. (...) también se ha dado una vida de lujos como rentar un yate privado o regalarse un viaje a Europa con su esposa Leticia Torres, quien es la presidenta del DIF en ese municipio.
Así pues, queda de manifiesto la incapacidad del presidente municipal morenista de San Pedro Cholula, Luis Alberto Arriaga Lila, para generar gobernabilidad y llevar al municipio por el camino que la sociedad requiere. Antorcha no busca, y nunca ha sido su intención, entorpecer esta o cualquier otra administración, por el contrario, quiere ayudar a resolver los problemas de la gente pobre, pero si el gobierno continúa con su política de oídos sordos, el pueblo pobre y organizado recurrirá a la manifestación y denuncia pública para exigir y evidenciar la ineptitud de esta administración y la política de palabrería de Arriaga.
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