Hace 19 años, tres profesionistas, hijos del pueblo, empezaron a picar piedra aquí en el estado de Durango, para lo que a muchos les parecía ser prácticamente imposible: entre otras cosas, lograr crear en la juventud duranguense unas verdaderas joyas del arte y la cultura, como la danza, poesía y oratoria.
Los referidos profesionistas son Pedro Martínez Coronilla, hoy presidente del Comité Estatal del Movimiento Antorchista de Durango, Juan Pablo Muñoz Alderete, dirigente en el municipio del Mezquital y Luz del Carmen Ocón Veloz, que perdió la vida en el 2003 en un accidente automovilístico mientras regresaba de una reunión de trabajo.
La aventura comenzó con un pequeño albergue estudiantil, la hoy denominada Casa del Estudiante General Francisco Villa, que empezó recibiendo jóvenes de municipios como Mezquital, Tlahualilo y Canatlán, una institución que inició funcionando en casas rentadas y sosteniéndose prácticamente de la colecta pública; pero el espíritu de superación y de transformar lo que había llegado a sus manos, siempre los acompañó, por lo que inmediatamente empezaron a tocar puertas ante las instancias gubernamentales, y luego de innumerables antesalas y en más de una vez, recurrir a protestas públicas, se logró fortalecer y posicionar este proyecto conquistando apoyos para este albergue.
Paralelamente, se inició con un trabajo popular logrando gestionar servicios como agua, luz, drenaje y pavimentaciones para las colonias de la capital, como la Gobernadores, Las Palmas, Mayagoitia, etc.; y, en el año 2004, ante la necesidad urgente de viviendas para miles de familias, el pequeño equipo decidió iniciar una lucha junto a un grupo de casi 400 familias, para crear una colonia cuyos terrenos estuvieran a su alcance. Durante los últimos 6 meses de gobierno de ángel Sergio Guerrero Mier, las familias estuvieron en plantón frente a Palacio de Gobierno y no encontraron respuesta satisfactoria; pero esta lucha tenaz ayudó para que el siguiente gobernador autorizara un crédito, en el año 2005, para la adquisición de un predio en donde se fundó de la colonia Luz del Carmen, en el oriente de la ciudad, junto con la cual, inició la operación de escuelas como el Jardín de Niños "Luz del Carmen Ocón" y la primaria "Unión, Fraternidad y Lucha", que después de 5 años de lucha y trabajar prácticamente a la intemperie, se logró su reconocimiento oficial. Hoy esas esas escuelas son las más equipadas de la zona.
El pequeño equipo empezó a crecer rápidamente y llevó a las familias a una vida mejor, en lo material, pero también en lo espiritual, ya que los hijos de esas familias tuvieron donde instruir a sus hijos, lo cual representó un enorme contraste con otros centros de población cercanos. Este logro se repitió durante los siguientes años y hoy, a casi dos décadas de distancia, existen 11 colonias formadas por el Movimiento Antorchista en el oriente de la ciudad capital, acompañadas siempre por escuelas desde el preescolar hasta la preparatoria, y a nivel estatal, un trabajo de esta misma naturaleza, en 12 municipios, con cerca de 39 mil duranguenses agremiados.
Tanto en las escuelas, como en las colonias y pueblos, la labor del antorchismo nunca dejó de lado el trabajo cultural, por eso hoy se empiezan a cosechar los frutos. Desde hace algunos años, los grupos culturales del antorchismo duranguense, empezaron a conquistar medallas a nivel nacional, en diferentes disciplinas como la danza, baile, oratoria, música y poesía. Hace dos años por ejemplo, con la participación de cerca de 200 artistas duranguenses en la Espartaqueada Cultural Nacional, Durango quedó en el lugar número 10 dentro de la tabla general, destacándose por una mención honorífica en la disciplina de danzas autóctonas, con la interpretación del mitote tepehuano, propio de los indígenas del municipio del Mezquital (a cargo de los jóvenes de la Casa del Estudiante General Francisco Villa); y este año, la delegación duranguense se trajo 1 medalla de oro en Oratoria, con la participación de Flora Flores Nolasco, una mujer indígena oriunda del ya citado municipio, así como 3 medallas de plata, en poesía, con la participación de jóvenes de estas escuelas y la Casa del Estudiante también ya referida. Los próximos 30 y 31 de marzo, la Comisión Cultural Nacional del Movimiento Antorchista está convocando al XI Encuentro Nacional de Declamación y Durango está listo para acudir con estas grandes joyas.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario