México es uno de los países más grandes del mundo, con una población de más de 125 millones de habitantes. También ocupa el lugar 15 de las potencias mundiales (según cifras del Banco Mundial en 2017) y según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) el 33.6% de nuestra población vive en pobreza. Somos el último lugar de la OCDE en educación y en ciencias, lectura y matemáticas. Es claro que estamos en un inmenso rezago educativo, y ¿el gobierno de la "Cuarta Transformación" está haciendo algo por cambiar esta situación? Sus mismas acciones nos dicen que no.
En vez de invertir mucho más recursos en construir más planteles educativos, en mejorar la infraestructura de muchas escuelas que sólo están hechas de madera y cartón y apoyar verdaderamente a los más de 25 millones de estudiantes, el Presidente López Obrador eliminó el Ramo 23 y desapareció PROSPERA, y cambio, sólo nos ha dado cuentos titulados "Tarjetas del Bienestar" y "Becas Benito Juárez". Ante este panorama, en millones de mexicanos ha nacido una tremenda inconformidad contra esta política improvisada de gobernar al país, y ahora como siempre los estudiantes han vuelto a salir a las calles a manifestarse contra el Gobierno.
Miles de estudiantes de todo el país, organizados en la Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios Rafael Ramírez, hemos iniciado una importante jornada de lucha para que se cumplan las promesas del señor presidente ya que se nos ha dejado completamente desamparados, pues recordemos que ya no contamos con el apoyo de PROSPERA que poco o mucho nos ayudaba a continuar con nuestros estudios, y también que aunque nuestros padres nos ayuden, prácticamente su salario -de tan sólo 104 pesos diarios- solamente alcanza para la alimentación de tres personas si hacemos chiquito el estómago.
Así está la situación en todo el país. Y a pesar de las adversidades, ¿cómo los jóvenes humildes pudimos salir adelante académicamente, y estudiar la preparatoria o la universidad? Gracias al apoyo incondicional de las Casas del Estudiante "Serrano" y "Carmen Serdán" que fueron fundadas en los 80, en la ciudad de Puebla, por un grupo de jóvenes dispuestos a apoyar a estudiantes de escasos recursos económicos. Desde aquel entonces, se forjó un destacado espíritu de lucha en los moradores en busca de mejorar las instalaciones de dichas casas, algunos de ellos se convirtieron en excelentes profesionistas que aún siguen luchando, ahora, por mejorar las condiciones de vida de los mexicanos.
La lucha nunca se detuvo. En el año 2016 se inició la gestión para construir una nueva instalación de las casas "Serrano" y "Carmen Serdán" ya que no había espacio para dar alojamiento a los más de 300 moradores. Con el apoyo de la Doctora Soraya Córdova Morán y de toda la FNERRR, finalmente obtuvimos los frutos deseados: la construcción de la Casa del Estudiante "Hermanos Serdán", ubicadas a 15 minutos de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y que dará asilo a más de 400 moradores.
¿Y esto, qué tiene de importante? Bueno, la Casa del Estudiante da alojamiento a estudiantes de escasos recursos económicos, también se nos apoya con el comedor, regaderas, etcétera; cuenta con talleres de teatro, danza y baile folclórico, oratoria, poesía y deporte que ayudan a mejorar la disciplina y la convivencia de los moradores, además, cuentan con compañeros moradores preparados para dar asesorías para que los estudiantes mejoren su capacidad intelectual. ¿Esto es lo único? Pues no. Ahora nuestra lucha ha sido más fructífera logrando la construcción de la Casa para artistas "Macuil Xóchitl", en la que habitan jóvenes que se dedican especialmente a las diversas disciplinas artísticas y estos jóvenes se encargan de llevar arte y cultura a cada rincón de nuestro país.
Por eso, miles de estudiantes celebraremos este 23 de junio, con un majestuoso evento cultural, la inauguración de ambas casas y el XX Aniversario de la fundación de la FNERRR, que es la agrupación juvenil más grande, estructurada y seria que existe hoy en México. No olvidemos que la lucha sigue, aún faltan muchas cosas por lograr. No hay que espantarse del "nuevo gobierno", nada hará a favor de los estudiantes ni mucho menos de todos los mexicanos, sólo nos queda seguir en guardia para contribuir luchando la vida de miles de jóvenes estudiantes mexicanos. A ellos, a todos ellos, les decimos: ¡hasta la victoria siempre! ¡Súmense a nuestra lucha!
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