¡Dios nos libre!, decía una astuta viejecita que conocí de pequeño, cada vez que veía pelear y discutir a los adultos por cosas de niños. Y lo decía también como una forma de alejar el mal augurio que eso significaba. Pues a esto de la viejecita me atengo hoy, y digo también lo mismo, luego de enterarme de los desencuentros y desfiguros, protagonizados por algunos señores y señoras encargados de instaurar en Colima "la Cuarta Transformación" (4T): ¡Dios nos libre!
Le diré a qué desencuentros y desfiguros me refiero, para que usted, amigo lector, decida si vale o no la expresión con la que hoy he decidido iniciar esta humilde opinión.
El primer desencuentro se originó, según dicen los medios, por la imprevista visita sorpresa que hizo el señor Presidente López Obrador a la ciudad de Colima, visita que consistió sólo en detenerse a cenar en un conocido restaurant del norte de la ciudad ya de camino al aeropuerto. Hoy se sabe que regresaba de una gira por el estado de Michoacán, donde visitó los municipios de Coalcomán y Buenavista Tomatlán. Cual pedrada en medio de un gallinero, la mencionada visita levantó revuelo, polvareda y azoro entre las huestes morenistas y de la 4T, a grado tal y a tales niveles, que uno no puede menos que sorprenderse, del límite de las pasiones ocultas, a punto del desborde.
Veamos lo que dijeron los medio locales. Al día siguiente de la visita sorpresa ya mencionada, la Diputada Federal por Morena, Claudia Valeria Yáñez Centeno y Cabrera, declaró al medio Diario de Colima, que la visita del Presidente se debió a una acción para ver cómo trabajan los delegados, y reveló que en la entidad hay quejas de que no llegan los apoyos y que Indira Vizcaíno, es decir, la Delgada, "sabe cuáles son sus funciones y lo que tiene que hacer". ¡órales! Pero la respuesta no se hizo esperar. En su cuenta de Facebook, la Delegada Indira Vizcaíno Silva, también le dijo lo suyo a la Diputada, note usted el sarcasmo desde el inicio, amigo lector: "Querida Diputada", y luego de ponderar la función de los "servidores de la nación" e invitar a la legisladora a que lleve "su queja" a la Delegación correspondiente, le soltó a su vez también su reclamo, y entre comillas le dijo: "Nuestro compromiso y el de todos los que integramos la 4T, como tú, es unir esfuerzos para dar la mejor atención posible a los ciudadanos". Pero lo que a mí realmente me sorprendió fue cómo, a manera de rúbrica, finalizó su comentario: "AbrazosNoBalazos" . ¿A qué le llama "balazos" la Delegada de la 4T?
Pero a mí qué me importan esos desenlaces Morenos, dirá usted, paciente y atento lector, y tal vez tenga razón; pero sucede que, en ninguna de las aclaraciones hechas por la delegada se dice, si es verdad o no lo que denuncia la Diputada Yáñez Centeno, es decir, que los apoyos, en la entidad, no están llegando a la gente, que es lo que realmente me gustaría saber a mí y a todos los colimenses. ¿Qué es lo que está sucediendo con todos los apoyos prometidos por la 4T en Colima?, ¿miente la diputada Yáñez Centeno?, ¿miente la delegada Indira Vizcaíno?, ¿por qué eso de AbrazosNoBalazos? Pues para mí que los representantes de la 4T en Colima, igual que el señor Presidente, o creen que siguen en campaña electoral, o ya de plano la adelantaron. Como dije al principio de este trabajo: ¡Dios nos libre!
El otro encontronazo de la 4T no fue entre legisladoras o funcionarias, ni producto de la visita inesperada del señor Presidente, nada de eso. El encontronazo fue, entre el señor presidente Municipal de Armería y su señora esposa. Resulta que Salvador Bueno, así se llama el presidente, que ni resultó "Salvador", ni mucho menos "Bueno", según los medios locales, le propinó tremenda golpiza a su esposa, que por lo mismo lo denunció penalmente y en todas las instancias y asociaciones feministas, a grado tal, que dicen que estuvo a punto de pisar la cárcel por violencia intrafamiliar y otras cosas. Pero aclaro otra vez, que no es mi intención traer aquí un asunto que compete sólo al señor presidente y a su señora, de hecho, fueron ellos quienes lo ventilaron amplia y públicamente, tanto cuando se golpearon como cuando se reconciliaron. Lo que yo quiero destacar, es, en primer lugar, la filiación política del presidente: Morena-PES-PT; es decir, Salvador ganó gracias al "Tsunami" morenista. Pero deje usted, amigo lector, tan luego se supo del desagradable suceso doméstico denunciado por su señora esposa, Salvador Bueno se convirtió en el malo más malo de todos los malos de Colima; fue desconocida su militancia por el dirigente estatal de Morena, por el dirigente estatal del PT, por los diputados que ganaron por el PES, por la Delegada de la 4T, por las diputadas y diputados morenistas del Congreso, casi por todos sus otrora correligionarios. Todos y todas quienes lo postularon antes, por bueno, ahora lo desconocieron, por malo. No sé si tiene perro, pero creo que hasta su mascota lo desconoció. Así le fue al presidente municipal de Armería ¿Así trata la 4T a los hombres y mujeres de los que se sirvió para tomar el poder en el país? Pero además, ¿qué van a hacer ahora, todos los líderes de los partidos, diputados, diputadas, funcionarios y demás, quienes desconocieron a Salvador por malo, ahora que su esposa ya lo perdonó y anda pregonando que su Salvador es bueno? Qué tal. Hay cada cosa que uno tiene que ver con estos señores que andan construyendo la 4T.
Terminemos. No sé qué quiso decir la delegada Indira con eso de AbrazosNoBalazos, ni a dónde quería llegar la Diputada Yáñez Centeno con su denuncia, pero por salud de su proyecto de nación, pienso que deberían aclararlo públicamente. Los colimenses, como creo que todos los mexicanos, ya estamos hartos de partidos y gobiernos que sólo pregonan el cambio con discursos huecos, pero que nunca transforman la realidad social de los más pobres. Un gobierno que no construye obra pública para los pobres, que no crea los empleos bien pagados que se necesitan y que no libera de pago de impuesto a los pobres, no merece gobernar. Ese no es el proyecto de nación que queremos la mayoría. El tiempo lo dirá.
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